granola casera
INFORMACIÓN NUTRICIONAL
Mezclada con yogur natural o con leche y acompañada de un gran vaso de zumo de naranja, esta granola es una magnífica opción para el desayuno. Tiene de ventaja que puedes variar los ingredientes a tu gusto, y que puedes controlar los niveles de azúcar de la misma (además de evitarte productos químicos).
La avena es un cereal rico en proteínas y fibras, lo que provoca bastante saciedad al consumirlo. Además, promueve la liberación de serotonina, lo que hará que te sientas más calmado.
Las semillas y frutos secos son ricos en grasas de origen vegetal monoinsaturadas y poliinsaturadas, que nos aportan mucha energía y ayudan a absorber diferentes vitaminas, además de proteger nuestro corazón. También están repletos de proteínas, fibra, minerales y fitoquímicos.
Las frutas deshidratadas son una fuente de fibra, vitaminas y minerales excelente.
INGREDIENTES (para 1 tarro grande)
400 gr de avena (nosotros hemos usado avena sin gluten).
200 gr de frutos secos variados (nosotros hemos usado almendras, nueces, avellanas y semillas de calabaza).
80 gr de fruta deshidratada (nosotros hemos usado manzana y mango).
2 o 3 cucharadas de miel o sirope de ágave.
1 cucharada de aceite de coco.
1 pizca de canela (opcional).
ELABORACIÓN
En una sartén, a fuego medio-bajo, dorar los copos de avena durante 5 minutos, subir el fuego a medio-alto, y terminar de dorar durante 10 minutos (cuando huela a avena tostada y estén un poco más oscuros, es que están listos). Retirar la sartén del fuego y añadir los frutos secos, las frutas y remover. Añadir el aceite de coco, la canela y la miel poco a poco y remover bien. Dejar enfriar y guardar en un bote.